Castelló, un mágico triángulo natural que enamora
Montaña, mar y huerta se fusionan en esta capital levantina que cautiva, convertida en un oasis de bienestar y relajación a orillas del Mediterráneo Gestada en lo alto de un cerro, bajó al llano para, desde allí, acariciar el mar. Un casco antiguo cargado de historia, tranquilo y muy manejable, conecta con un distrito marítimo –el Grau– donde los frutos del mar llegan a su lonja y maridan su rica gastronomía con los variados productos de su huerta. Aroma de naranjos que se funde con la suave brisa del Mare Nostrum y una privilegiada climatología, con más de 300 días de sol al año. Y 4 kilómetros de costa divididos en tres playas donde pasear relajadamente… y hacer que el tiempo se detenga. Aunque se asiente en el llano –en esa Plana que de da ‘apellido’– la historia de Castelló arranca en lo alto de una colina: el cerro de la Magdalena, presidido por un castillo de origen árabe, el Castell Vell, y una posterior ermita. El castillo fue conquistado por el rey Jaime I en 1233 pero las duras condiciones de vida de aquella zona hicieron que, una vez en poder de los cristianos, el monarca accediera a su traslado. Y allí, en la fértil alquería de Benirabé, la ciudad fue creciendo y consolidándose a orillas del Mediterráneo. Sumergirse en su casco antiguo es disfrutar de su esplendor medieval que tiene su corazón en la Plaza Mayor, donde conviven armoniosamente el ayuntamiento –en un palacio neoclásico–, la gótica Concatedral de Santa María, el Mercado Municipal y el gran símbolo de la ciudad: el Fadrí, una torre-campanario octogonal, aislada del templo religioso, cuyas 11 campanas anunciaban los más importantes acontecimientos. Pero Castelló es también un gran museo al aire libre, con algo más de un centenar de esculturas repartidas por calles y plazas y una decena de llamativas pinturas murales decorando edificios. Y para oxigenarse, nada mejor que un relajado paseo por cualquiera de su docena parques y jardines, entre los que destaca el de Ribalta, en el centro de la ciudad, junto a los modernistas edificios de la Farola. Y a las afueras, dos maravillosos parajes naturales: el Desierto de Las Palmas, que alberga varios castillos; y la Magdalena, con su sagrado ermitorio. Dos grandes avenidas constituyen la majestuosa pasarela que conduce hasta su distrito marítimo, el Grau, donde cohabitan el puerto comercial, el pesquero y la lonja, que nutre a la cocina castellonense de sus frutos del mar: pulpos, sepias, galeras…. Y frente al Grau, otra maravilla natural: las islas Columbretes; cuatro grupos de islotes volcánicos con un valioso fondo submarino. Sus 4 kilómetros de costa están repartidas en tres playas –el Pilar, Gurugú y Serradal– todas con bandera azul. El lugar perfecto para descalzarse y pasear relajadamente por su fina y dorada arena, disfrutando de un sentimiento de libertad y bienestar donde cuerpo y mente se funden en mágica armonía. Más información en la web: https://www.castellonturismo.com
7 veleros históricos, en la más espectacular 'escala a Castelló'
Del 16 al 20 de abril el Grau de Castelló acogerá por tercer año su gran Fiesta del Mar, con las novedades de dos barcos de los Países Bajos y uno francés Los navíos holandeses Oosterschelde y Morgenster, y el francés Le Français (donde se rodó ‘Los tres mosqueteros’), serán las grandes atracciones de la 3ª edición de ‘Escala a Castelló. A ellos se unirán otros cuatro no menos llamativos, de anteriores ediciones, como la fragata zarina Shtandart, el Galeón Andalucía, el Santa Eulàlia o la Nao Victoria, réplica de la que dio la primera vuelta al mundo en el siglo XVI. Todos ellos, arropados por el patrullero Infanta Elena, el barco de pescaturismo ‘El Paraíso’, recreaciones históricas de Artillería, Infantería y Caballería, desfiles, música, gastronomía, un gran Mercado Marinero y dos Justas Náuticas: nocturna y diurna. Más de 100 actividades para disfrutar en familia del mayor espectáculo náutico de época que pueda verse. Lo que empezó hace tres años siendo un arriesgado sueño… se ha convertido en una exitosa realidad. Castelló de la Plana quiso poner en valor su vocación mediterránea y marinera con un gran evento náutico que pudiera disfrutarse en familia. Y en colaboración con la localidad francesa de Sète –que acoge una reconocida cita bienal de barcos históricos, ‘Escale à Sète’– gestó en 2018 ‘Escala a Castello’. Una gran Fiesta del Mar que navega rumbo a su 3ª edición, que se celebrá del jueves 16 al domingo 20 de abril, a rebufo de la Semana Santa. La participación de grandes veleros, principales estrellas del evento, casi se ha duplicado respecto a la 1ª edición. Y en esta 3ª ‘Escala a Castelló’ podrán visitarse 7: 1–Goleta Oostershelde. Holandesa, de tres mástiles y reconocida por el gobierno neerlandés como monumento de gran valor histórico y cultural. Fue construida en 1917 para transporte de mercancias de larga distancia y restaurada en 1992. 2–Bergantín Morgenster. Navío holandés de dos mástiles que se botó en 1919 como transportador de arenque y ampliado posteriormente como barco de pesca. En 2008 fue restaurado como barco de aprendizaje para futuros navegantes. 3–Le Français. Construido en 1948 como barco báltico tradicional, se ha convertido luego en escenario de filmes como ‘Los tres mosqueteros’, ‘Shacketon’ o ‘David Copperfield’. 4–Fragata Shtandart. Reconstrucción, en 1999, de un histórico buque de guerra ruso del siglo XVIII que capitaneó por vez primera el mismísimo zar Pedro I el Grande. Recibió este nombre en honor al estandarte imperial. 5–Nao Victoria. Réplica construida en 1991 del navío que en el siglo XVI (1519-1522) dio la primera vuelta al mundo, capitaneado por el español Juan Sebastián Elcano. 6–Galeón Andalucía. Construido en 2009-10 a imagen y semejanza de los barcos españoles que en el siglo XVII realizaban rutas comerciales con América y Filipinas a través de las llamadas ‘Flotas de Indias’. 7–Pailebote Santa Eulàlia. Velero centenario dedicado al transporte de cereales, madera, sal y minerales. Pertenece al Museo Marítimo de Barcelona y ha sido declarado Bien Cultural de Interés Nacional por la Generalitat de Catalunya. Otra novedad es la patrullera Infanta Elena, que ha participado junto a la Fuerza Naval Europea en la lucha contra la piratería, escoltando el tráfico mercante vulnerable. A ellos se unen los de Salvamento Marítimo y el barco de pescaturismo ‘El Paraíso’. También en el mar podrá disfrutarse de las espectaculares Justas Náuticas que dirimirán dos embarcaciones venidas de Sète, donde tienen una gran tradición. Son combates similares a los medievales pero que en lugar de caballos utilizan barcas de remeros sobre las que se ubican dos contrincantes con escudos y lanzas de madera. Ya en tierra, el puerto del Grau se convertirá en escenario de un gran Mercado Marinero, con medio centenar de puestos de artesanía; campamentos de época con recreaciones históricas de Artillería, Infantería y Caballería; talleres infantiles, juegos, animación callejera, un Gran Desfile Histórico y actuaciones musicales. Todo, para disfrutar de cinco intensos días con más de un centenar de actividades que podrán compartir padres de hijos. El mayor espectáculo náutico de época aspira a batir su récord de 75.000 visitantes. Y por tercer año consecutivo, vuelve a hacer ‘Escala a Castelló’. Más información en la web: https://www.castellonturismo.com
8 Rutas para descubrir un tesoro natural de Castelló: el Desert de les Palmes
Este año cumplirá tres décadas y, junto al ermitorio de La Magdalena y la Islas Colombrutes, completa la trilogía de parques naturales que Castelló ofrece a sus visitantes 3.200 hectáreas integran el Desert de Les Palmes, una de las joyas naturales de Castelló. Su variada fauna y vegetación arropan otros atractivos patrimoniales como los castillos de Miravet, Montornés y el Castell Vell –lugar de origen de la capital de la Plana– o las ermitas de Les Santes y de la Magdalena. Un lugar ideal para combinar el senderismo –a través de 8 rutas para todos los gustos– con los chapuzones en la playa. De entrada, su nombre puede llevar a engaño; pero nada más lejos de la realidad… El Desert de les Palmes poco tiene que ver con lo que entendemos por una zona árida y desértica. Más bien al contrario, este parque natural –que justo en octubre de este año cumplirá tres décadas– es una de las joyas verdes que Castelló de la Plana comparte con otros cuatro municipios: Benicàssim, Cabanes, La Pobla Tornesa y Borriol. Una parte de su nombre –desierto– deviene del término con el que los carmelitas descalzos, allí presentes, designaban a los lugares solitarios ideales para el retiro y la meditación. La otra –las palmas– a la abundante presencia de una palmera autóctona: el palmito. Sus 3.200 hectáreas albergan una rica variedad de vegetación –brezo, enebro, madroño, romero, tomillo o jaras, además del citado palmito– y de fauna: más de 120 especies de aves, como el águila perdicera, halcón peregrino, gavilán, lechuza o buho; mamíferos como conejos, jabalíes, zorros o ardillas; y reptiles como la lagartija. El Desert de les Palmes, al que desde Castelló de la Plana se accede por la salida 46 de la AP-7 (Castelló Norte-Benicàssim), acoge también interesantes joyas patrimoniales como el Castillo de Miravet, conquistado a los árabes por el Cid en 1091; el Castillo de Montornés, del siglo X y habitado hasta finales del XV; el Castell Vell, donde se gestó Castelló antes de trasladarse a la plana en el siglo XIII; la ermita de Les Santes, reconstruida en el siglo XVII; la ermita de la Magdalena, cuya romería constituye el momento álgido de las fiestas fundacionales castellonenses; o el Monasterio Desierto de Las Palmas, habitado por los frailes carmelitas descalzos desde 1784. Este verano, entre chapuzón y chapuzón en las tres playas castellenses –Pinar, Gurugú y Serradal– este parque natural es ideal para disfrutar de un poco de turismo activo al aire libre a través de sus 8 rutas senderistas: 1 – Subida al monte Bartolo. Parte del Centro de Interpetación del parque y asciende al punto más alto del mismo, la cima del Bartolo, a 729 metros de altitud. Es la cota más alta del parque y desde ella se domina el Maestrazgo, la Serra d’Espada y las islas Columbretes. Consta de 6,8 kms y un tiempo estimado de 1 hora 45 minutos. 2 – Itinerario circular por las Crestas. También asciende al Bartolo pero por otro lado. Es de las rutas con mayor dificultat pero queda compensado por sus excelentes vistas panorámicas. Consta de 7 kms y una duración de 2 horas 20 minutos. 3 – Itinerario circular de les Santes por el Bartolo. Parte del Centro de Interpretación, asciende al Bartolo y desciende luego por un barranco hasta la ermita de Les Santes. Consta de 15,5 kms y una duración de 4 horas. 4 – Itinerario a La Pobla Tornesa. Ruta que transcurre por preciosas sendas y caminos forestales hasta este bello pueblo. En él puede admirarse el Palacio del Varón, el Horno y su iglesia del siglo XVIII. Consta de 5,7 kms y una duración de 1 horas 30 minutos. 5 – Itineario lineal al Castillo de Montornés. Permite disfrutar de sus ruinas árabes del siglo X, con impresionates vistas panorámicas a La Plana, la Serra d’Espada y el puerto del Grau. Consta de 3,5 kms y una duración de 1 hora 30 minutos. 6 – Itinerario circular por las Fuentes del Desert. Parte del mirador de Sant Josep (donde pueden aparcarse los vehículos) y permite admirar tres de las fuentes del parque: Fuente de Sant Josep, Fuente Tallada y Fuente de Roc, el manantial más puro y mejor conservado. Es la ruta más refrescante. Consta de 7 kms y una duración de 3 horas. 7 – De Benicàssim a la Fuente Tallada. Parte de esta localidad –situada a 12 kms de Castelló– y transcurre por el barranco de Miravet hasta esta emblemática fuente. Desde ella puede admirarse en toda su plenitud las Agulles de Santa Àgueda. Consta de 4,8 kms y una duración estimada de 2 horas 30 minutos. 8 – Itinerario circular de Les Santes. Ruta senderista por uno de los barrancos más frescos de todo este paraje natural y arranca en su ermita, enclavada en el propio barranco. Desde ella se contempla la cumbre del Bartolo, el barranco de la Porquereta y, al fondo, La Pobla Tornesa. Consta de 4 kms y una duración de una hora.
Un apasionante viaje celestial desde el planetari de Castelló
Siete talleres gratuitos a la semana, cuatro exposiciones y ocho proyecciones lo convierten en una de las atracciones de la capital de la Plana para este agosto Observaciones con telescopio todos los miércoles. Talleres lúdico-científicos diarios sobre astronomía, la mujer y la ciencia, y el cambio climático. Exposiciones sobre plastihistoria de la música o eclipses totales de sol. Proyecciones para explorar el sistema solar o los planetas extrasolares… El Planetari de Castelló –primero construido en la Comunidad Valenciana, hace casi tres décadas– propone un intenso y tentador programa de actividades para disfrutar en familia este verano ‘viajando’ por el universo. De Castelló… al cielo. La oferta veraniega de la capital de la Plana suma un nuevo atractivo turístico a sus cuatro kilómetros de playas –Pinar, Gurugú y Serradal–; a su sabrosa gastronomía, que marida mar, montaña y huerta; a sus parques naturales –Desierto de Las Palmas, Islas Columbretes, Ermitorio de la Magdalena– o a sus rutas urbanas: su Planetario. Ubicado en el distrito del Grau, entre el parque del Pinar y el Paseo Marítimo, fue el primero de estas características construido en la Comunidad Valenciana ya que se inauguró en mayo de 1991, hace casi tres décadas. Exteriormente destaca por su cúpula blanca de 25 metros de diámetro y una escultura del castellonense Juan Ripollés bautizada como La Hembra del Mar. Y en su interior acoge un péndulo de Foucault, varias salas para exposiciones y talleres y una gran sala de proyecciones. Para este verano, el planetario ha mantenido los dos ejes fundamentales de años anteriores, la divulgación científica y la astronomía, sumándole otros dos: la mujer y la astronomía y el cambio climático. Cada día de la semana se ofrece un taller gratuito diferente, de casi dos horas de duración, que da inicio a las 18.00 horas. Los lunes, ‘Exploradores estelares’ nos descubre las estrellas más importantes del firmamento. Los martes, ‘Mujeres y ciencia’ recoge las aportaciones de las mujeres científicas a lo largo de la historia. Los miércoles, ‘Cambio climático’ propone cómo implicarse para luchar contra este gran problema de nuestro tiempo. Los jueves, ‘Club de ciencia’ realiza experimentos de física y química de forma diferente. Los viernes, ‘Instrumentos astronómicos’ construye instrumentos para observar los cambios en el cielo. Los sábados, ‘Chispa mágica’ versa sobre ciencia y tecnología. Y los domingos, ‘Ciencia Random’ anima a expresar la creatividad personal a través de la ciencia y el arte. La sala de proyecciones ofrece un total de ocho, que se irán alternando todos los días de la semana, con precios de 4 euros (adultos) y 3 euros (entre 4 y 18 años). Tres de ellas son especialmente dedicadas a los niños: ‘Abuela Tierra’, que cuenta cómo nació la Tierra y la Luna. ‘La niña que sabía cominar al revés’, que nos descubre los secretos de la luna y habla con los árboles. Y ‘Explorando el Sistema Solar’, un viaje por nuestro sistema, para conocer los planetas, cometas, asteroides, etc. Y para el público en general, otras cinco proyecciones: ‘Mil millones de soles’, sobre cómo se mide la distancia de las estrellas; ‘Planetas extrasolares’, que plantea si hay vida en algún otro planeta; ‘Astronomía, 3000 años de observación del cielo’, con hitos astronómicos de la mano de Einstein; ‘Cielo profundo’, que invita a conocer nuestro fascinante Universo; y ‘De la Tierra al Universo’, un viaje hacia los astros más alejados de nosotros. A las dos exposiciones permanentes del planetario –‘Islas Columbretes’ y ‘Mineralogía y Paleontología’– se suman dos temporales: ‘PlastiHistoria de la Música’, en la que los visitantes conocerán la historia de la música a través de figuras de plastilina; y ‘Eclipses de Sol’, que muestra los acaecidos en Castelló de la Plana durante casi un siglo y medio, entre 1860 y 1905. Estas exposiciones estarán abiertas al público de forma gratuita todos los días de la semana. Por la mañana, de 10.30 a 13.45 horas; y por la tarde, de 17.00 a 20.45 horas. Muy interesantes serán las veladas de los miércoles del Planetario con observaciones mediante telescopio de los cuerpos celestes, de 22.30 a 00.30 horas.